¡La Cintumbare en la cola! ¡Y dice que está feliz!
Dime, hermano, ¿te has enterado del último chisme? La Cintumbare, esa influencer que daba candela en las redes, ¡la mandaron pa’ Cuba! Y lo que más jode es que la tipa, ¡está en una cola! Sí, asere, ¡la misma que ella tanto criticaba!
¡De Miami a la cola del frijol!
Resulta que después de un buen tiempo metida en la cárcel de Inmigración allá en el yuma, a la Cintumbare la mandaron de vuelta a la isla. Y en vez de tirar un berrinche, la muchacha ha decidido echarle guapería al asunto y se ha puesto a fajarse con las colas como cualquier cubano.
La cosa es que subió unas fotos a Instagram donde sale con su jaba, haciendo cola bajo el sol, diciendo: Feliz en mi país.
¡El debate en las redes se encendió!
Claro, asere, esto ha creado una tremenda película cubana en internet. Unos dicen que está gozando, que ella se lo buscó. Otros dicen que es una descarada, que en realidad se está lamentando en silencio. Y hay hasta los que dicen que está jugando sucio y que en realidad es una estrategia para más fama.
Algunos le tiran con los memes, otros la defienden a capa y espada.Hay hasta quien le pregunta si ya se apuntó en la libreta. Otros, en cambio, le recuerdan lo bonito que era Miami…
La fiesta continúa… ¡aunque en Cuba!
Y para que no quede duda de que está feliz, la Cintumbare también ha estado subiendo historias a sus redes sociales bailando y divirtiéndose en las noches cubanas, ¡como si nada! Parece que a pesar de la candela, la Cintumbare sabe cómo disfrutar la vida, ¡donde sea!
¡Un cuento que da para una novela!
Al final del día, la historia de La Cintumbare es un reflejo de la realidad cubana: llena de contrastes, de ironía, y ¡de tremenda candela! Que si la deportación, que si la cola… ¡un verdadero chisme de esquina! Y aunque algunos la critiquen, otros la admiran por su resistencia. Lo que es de pinga, es que la gente no pierde el sentido del humor, ¡ni aunque estén haciendo cola bajo el sol!