Dime, hermano, échate este cuento que está más bueno que un mojito. Óscar de la Hoya, el “Golden Boy,” le cayó encima a “Canelo” Álvarez como un ciclón. ¿El motivo? La pelea de “Canelo” contra el cubano William Scull, una pelea que dejó a más de uno con la boca seca.
Capítulo 1: Un combate más soso que un pan con agua
La pelea fue, en palabras de la calle, un “cotufazo.” Scull, el cubano, se fajó el “corre que te pillo” durante los doce asaltos, moviéndose como una chicharra en un bate de béisbol. “Canelo,” por su parte, se veía como si estuviera en una misa, ¡sin candela, asere! No conectó ni un golpe que valiera la pena mencionar. Al final, ganó por decisión unánime, pero la gente quedó con ganas de más. Más candela, más golpes, más… ¡algo!
Capítulo 2: De la Hoya le suelta los perros
Y aquí es donde entra en escena el “Golden Boy.” De la Hoya, sin pelos en la lengua, le soltó tremenda muela a “Canelo” en un video que se hizo viral más rápido que un chisme en una cola. “Te pagan millones para enfrentarte a alguien que sabías que iba a correr… Lo escogiste, así que no te quejes”, le dijo, con un tono más pausado que el de un abuelo contando un cuento de antes.
¡Tremendo zasca! De la Hoya no solo le echó en cara la falta de acción en la pelea, sino que le recordó que “Canelo” fue el que decidió enfrentarse a Scull. Una estrategia, según De la Hoya, para garantizar una victoria fácil, pero sin el espectáculo que la gente espera de un campeón como “Canelo.”
Capítulo 3: La presión sube… ¡y Benavídez espera!
De la Hoya no se quedó ahí. Aprovechó la oportunidad para volver a exigirle a “Canelo” que se enfrente a David Benavídez, un peleador que se rumorea tiene el poderío necesario para hacerle frente al campeón indiscutible. “Todos quieren ver esa pelea… ¡Ya basta de combates sin emoción!”, sentenció.
Capítulo 4: La respuesta del cubano
Scull, por su parte, salió a defenderse diciendo que no se estuvo corriendo, sino que fue su estrategia para pelear. Según él, estaba nervioso porque era su primera vez en un escenario así. Lo que para muchos fue una estrategia para evitar golpes, para Scull fue un plan para ganar. ¡Cada cual con su cuento!
Conclusión: El show continúa…
Al final del día, esto es un “show” del boxeo, ¡más largo que una semana sin guagua! El chisme está más caliente que un ajiaco recién salido de la olla. “Canelo” tendrá que fajarse para calmar las críticas, o, quizás, la próxima vez escogerá un rival que le ponga la chispa que necesita. Mientras tanto, De la Hoya sigue haciendo leña del árbol caído.