¡Candela en Holguín! Derrame de petróleo prende fuego al barrio
Dime, hermano, échate este cuento. Sucedió en Holguín, en el reparto La Aduana, un lugar muy tranquilo. Pero este martes se armó una candela que parecía el fin del mundo.
El petróleo que prendió fuego
Resulta que, según cuentan los vecinos (y en Cuba, los vecinos son los mejores reporteros), hubo un derrame de petróleo. ¡Petróleo!, asere. No te imaginas el susto. Parece que el “regalito” vino de la Empresa de Conservas Vegetales Turquino. “Petróleo del Turquino,” dijo un vecino en un video. “Se explotó un tanque o algo así.” Ño, tremendo.
El humo, los videos…
Enseguida, la gente empezó a grabar videos con los celulares. ¡Y qué videos! Se veía una columna de humo que parecía un monstruo gigante, el olor a quemado a kilómetros… una verdadera película, de esas con final impredecible. Los vecinos, desesperados, gritaban que llamaran a los bomberos, ¡pero los bomberos no aparecían!
Vecinos ayudando vecinos… mientras el fuego crece
Mientras el fuego seguía creciendo, los vecinos se fajaban como leones para salvar lo que podían. Hasta ayudaron a un tipo a mover su carro que estaba estacionado cerca de las llamas. Eso sí que es solidaridad a lo cubano.
Más candela en otros puntos de la isla
Y este cuento no acaba ahí, porque ese mismo día, en Centro Habana, otra candela en la azotea de una casa. ¡Como si fuera poco! Y el lunes anterior, ¡otro incendio en Caibarién, Villa Clara! Una señora con problemas mentales le prendió fuego a una casa. Menos mal que nadie resultó herido grave. ¡Pero que susto!
Y si eso fuera poco, en Matanzas, un accidente con un camión cisterna lleno de alcohol. El pobre copiloto perdió la vida y el chofer terminó herido. ¡Tremendo lío!
¿Qué está pasando con los incendios en Cuba?
Mucha gente se pregunta qué está pasando con tantos incendios. Y mira, no es ciencia ficción, asere. Hay problemas con las instalaciones, mala manipulación de combustibles, falta de mantenimiento… todo eso suma. Y cuando las cosas se dañan, y no hay recursos para arreglarlas… ¡pum! Incendio.
En fin, mi gente, esto es solo un pedacito del cuento. La candela en Holguín y en otros lugares de Cuba nos deja pensando. ¿Qué pasará después? Eso solo el tiempo lo dirá. Pero mientras tanto, vamos a seguir pendientes por si acaso…