¡Azúcar! ¡Triunfo de Emilio Estefan! ¡La Corte le da un ¡Qué Bola! a la demanda!
¡Ay, mi gente linda! ¡Prepárense para un cuento más sabroso que un lechón asado!
¡Que bolá, mi vida! ¿Listos para gozar? La Corte de Estados Unidos le dio un tremendo revés a una demanda contra el mismísimo Emilio Estefan, ¡el rey del ritmo! La cosa se puso más caliente que la salsa de mi abuela, ¡porque el juez dijo que las acusaciones eran tan falsas como un billete de tres pesos! ¡Azúcar!
Un túnel secreto… ¡y un cuento chino!
La demanda decía que Emilio estaba metido en un lío de trata de personas, manipulación de testigos y hasta obstrucción a la justicia. El demandante, un señor llamado Joseph Manzaro, aseguraba que sufrió un abuso sexual en una fiesta en una casa relacionada con Emilio… ¡a través de un túnel secreto que conectaba con la casa de Diddy! ¡qué imaginación!
Pero, mi gente, ¡eso es más falso que un billete de madera! El juez dijo que el túnel era una “imposibilidad ingenieril”, ¡más inverosímil que encontrar un guajiro en Nueva York sin su café cubano! Y para colmo, las celebridades que supuestamente estuvieron en esa fiesta, como Jay-Z, Beyoncé y LeBron James, ¡ni siquiera estaban en Miami ese día! ¡Qué bemba, mi vida!
¡La familia Estefan responde con sabor!
La familia Estefan soltó un comunicado más dulce que el azúcar, explicando que la casa en cuestión ni siquiera era donde vivían. Que la seguridad de Star Island es más estricta que una guardia de honor, ¡y que nunca permitieron accesos ilegales! Además, el abogado del demandante, ¡qué falta de respeto!, fue sancionado por presentar un caso tan flojo.
¡El final feliz!
¡Y el final, mi cielo, es pura gozadera! La Corte desestimó la demanda por completo, ¡dejando al señor Manzaro con la boca abierta y sin un peso! La familia Estefan, por supuesto, está considerando acciones legales por los daños a su reputación. ¡Así se hace, mi gente! ¡Así se defiende el nombre de Cuba con orgullo!
¡Estefan: puro ritmo y sabor!
Y Emilio, mi vida, sigue demostrando que es un campeón, ¡dentro y fuera del estudio! Su música sigue poniendo a bailar a todo el mundo, ¡y ahora también demostró su fuerza para defender su nombre! ¡Viva Cuba! ¡Viva Emilio Estefan! ¡Azúcar!