¡Ay, Miami! ¡La cosa está que arde por los cubanos!
Dime, hermano, ¿qué te cuento? En Miami, la cosa se puso más caliente que una tarde en pleno agosto. Resulta que los cubanos de allá, cansados de esperar, se han unido pa’ exigirle al gobierno que quite el “Travel Ban” de una vez. ¡Y no es cualquier cosa, eh! Hablamos de miles de familias separadas, con los corazones partidos en dos como un mango maduro.
¡Familias divididas, un dolor que quema!
Esto no es chisme de esquina, asere. El problema es de verdad. Residentes permanentes y ciudadanos americanos, cogieron candela y formaron el grupo “Residentes y Ciudadanos Unidos” pa’ pelear por sus derechos. El cuento es que este Travel Ban, que es como un muro invisible, está impidiendo que muchas familias cubanas se reúnan. ¿Y por qué? ¡Porque las categorías de reunificación familiar también están afectadas!
Hablamos de años de espera, de trámites infinitos, de esperanzas que se marchitan como un racimo de plátanos verdes. Es una situación que te deja la lengua afuera desde que sale el sol, ¡una verdadera tragedia!
¡Protesta pacífica, pero con fuerza!
Prepárense, porque el domingo 24 de agosto habrá candela en Miami. La protesta será en el Versailles, un lugar histórico en la lucha cubana. Los organizadores dicen que será pacífica, con la gente vestida de blanco, como símbolo de paz, y con carteles bien claros, pa’ que no haya dudas. La idea, mi gente, es hacer ruido, visibilizar el problema y exigir que se acabe esta injusticia.
¡El Travel Ban: un dolor de cabeza para muchos!
Este Travel Ban, chama, es un verdadero dolor de cabeza. Afectan visas de todo tipo: turismo, negocios, estudios… ¡y la reunificación familiar! Muchos cubanos tienen que fajarse con abogados, y gastar un dineral en procesos que parecen no tener fin. Es un abuso, una falta de respeto, ¡una verdadera comemierda!
¡Un llamado a la unidad!
Esta protesta en Miami es un ejemplo de cómo los cubanos lejos de la isla, se unen para reclamar sus derechos. Es un grito que resuena por todas partes, un mensaje claro y contundente: ¡Queremos estar con nuestras familias! ¡Basta ya de separaciones! Que esta lucha sirva para unir a todos los cubanos, dentro y fuera de la isla, en una misma causa.