¡Oye, mi hermano, échame este son! Así como suena el tambor, te lo digo…
¡Ay, Lis, que te fuiste a Laos!
Dejando atrás la isla, donde el pueblo se desata…
En Laos, tierra lejana, tu alma encuentra la calma,
mientras aquí, en mi Habana, la gente grita ¡Ay, mama!*
Con iPhone en la mano, rezas por la paz mundial,
pero el hambre en mi solar, es una guerra sin igual.
¡Ay, Lis, que te fuiste a Laos!
Con tacones y cinismo, mientras Cuba se desmorona…
El azúcar de la caña, se pudre en los centrales,
mientras tú, en lujoso viaje, ignoras nuestras señales.
¡Ay, Lis, que te fuiste a Laos!
Dejando atrás la isla, donde el pueblo se desata…
La rumba se apaga lento, sin el ritmo del tambor,
la mulata se entristece, al ver la dura situación.
Las calles, oscuras y tristes, el pueblo llora sin cesar,
y tú, con tu sonrisa calma, te alejas del gran pesar.
¡Ay, Lis, que te fuiste a Laos!
Con tacones y cinismo, mientras Cuba se desmorona…