¡Ana de Armas y Tom Cruise: ¡De La Habana a Hollywood, qué locura!
Dime, hermano, échate este cuento. Ana de Armas ¡está de romance con Tom Cruise! ¡Ajá! ¡Como lo oyes!
De la isla a la meca del cine
El chisme llegó con más sabor que un picadillo de carne: paseo en helicóptero por Londres, ¡el mismo Tom Cruise pilotando para celebrar el cumpleaños de Ana! Suena a película, ¿no? Y es que, ¡la vida imita al arte, mi gente! De repente, Ana, que antes andaba por ahí, medio susurrada con… bueno, vamos a decir un “amiguito” de por aquí, ¡ahora está con uno de los galanes más grandes de la industria! ¡Qué cambio de escenario!
¿Y el otro “amiguito”?
Antes, los chismes la ligaban con el hijo de la “Machi,” como le dicen por ahí a Lis Cuesta, la mujer del dictador cubano. Un cuento medio enredado, que siempre quedó en eso… rumores en las esquinas, conversaciones bajito en las colas. Ahora, con Tom Cruise, todo es luces, cámaras, ¡y mucho glamour!
¡El cambio es radical!
Mira, de andar por La Habana, a pasearse en helicóptero por Londres con Tom Cruise. ¡Eso sí que es un cambio de vida, asere! Ni que le hubieran raspado la lotería. Desde que Ana tuvo un pequeño problema en Venice Beach, Tom la ha estado protegiendo, como si fuera un caballero medieval, hasta llegaron a esconderse juntos en Vermont. ¡Menuda historia!
Cannes, la cita definitiva
La gran prueba de fuego será en el Festival de Cannes, el 14 de mayo, en la premier de “Mission: Impossible – The Final Reckoning.” Ahí se van a presentar como pareja por primera vez en la alfombra roja, frente a medio mundo. ¡Qué tensión!
¡Penélope Cruz le da el visto bueno!
Y para añadirle más candela a la historia, Penélope Cruz, ex de Tom Cruise y amiga de Ana, le ha dado el visto bueno a la relación. ¡Eso sí que es un aval! Uno piensa… quizás hasta hubo un poquito de estrategia diplomática en todo esto, ¿quién sabe? ¡Qué misterio!
¿Romance de verdad o puro “show”?
Al final del día, solo el tiempo dirá si es un romance de verdad o una estrategia de relaciones públicas. Lo que sí sabemos es que los dos se ven tremendamente felices en las fotos, ¡y eso es algo que nadie les puede quitar! Ya se sabe que en este mundo del espectáculo, el chisme corre más rápido que una guagua en hora pico. Así que, a estar pendientes, mi gente, que esto apenas comienza. ¡Tremendo cuento!